Después de miles de horas acompañando a individuos y equipos en su desarrollo, nos ha fascinado reconocer cuáles son los factores y las estrategias que contribuyen en la construcción de equipos de alto rendimiento. La herramienta recoge nuestra experiencia y evalúa al equipo como un todo, es decir un sistema vivo y dinámico con su propia personalidad, visión, propósito, puntos ciegos e incluso su estado emocional. El proceso se enfoca en cuatro dimensiones: resultados, relaciones, procesos y estructura. Además, muestra cómo se combinan y potencian las fortalezas de cada integrante y muestra las oportunidades que tienen para mantener un rendimiento sostenible.